La fiesta del casamiento de Macri y Awada en Tandil
Este sábado,
Mauricio Macri y
Juliana Awada celebraron su casamiento en la estancia La Carlota, en Tandil, ante unos 200 invitados.
El jefe de Gobierno, quien aclaró que su esposa “no está embarazada lamentablemente”, decidió hacer allí el festejo porque fue el lugar en el que nació.
Entre las personalidades que dijeron presente, aparecen los nombres de
Miguel del Sel, el actor
Martín Seefeld,
Jorge Rial y
Guillermo Cóppola. También estuvo el ex delantero de Boca,
Guillermo Barros Schelotto.
Por el lado de la política estuvieron el jefe de gabinete porteño,
Horacio Rodríguez Larreta; la diputada
Gabriela Michetti y el jefe de la bancada PRO en Diputados,
Federico Pinedo, entre otros miembros de su Gabinete.
La lista de “faltazos”. En el festejo de Mauricio y Juliana no estuvieron: el padre del novio,
Franco Macri (estarían distanciados);
Marcelo Tinelli (tuvo el cumpleaños de una de sus hijas), y las conductoras
Susana Giménez y
Mirtha Legrand.
Macri, de 51 años, contrajo matrimonio por tercera vez, en este caso con Awada, de profesión empresaria y de 36 años, el martes pasado en el Complejo de Costa Salguero de la Capital Federal.
Por ahora, no habrá luna de miel debido a los compromisos que tiene Macri en su cargo público. Sin embargo, aseguran que en unas semanas tienen previsto irse a Beirut.
lugar para su casamiento, la fiesta
de boda se concretó en el
pueblo que Mauricio Macri eligió en
recuerdo de sus vacaciones y su abuela, quien jamás quiso mudarse de esa ciudad.
-Sí, ella nunca quiso irse de Tandil, se sentía bien acá, no manejaba, caminaba mucho por la ciudad y se llegaba hasta el asilo de niños que había donado mi bisabuelo, iba al almacén y a la Iglesia, que le quedaba a tres cuadras (Santa Ana), y me decía ‘no mi hijo, de acá no me voy porque conozco a todo el mundo y en Buenos Aires me pierdo con tanto ruido’
Para llegar a La Carlota hay que recorrer
38 kilómetros desde la ciudad cabecera, de los cuales un buen
tramo es de ripio. Eso no es todo,
los mosquitos resistieron la fumigación y molestaron bastante a los asistentes.
"El Eco Multimedios", rescata la
crónica local con
precisión y mirada periodística lejana a las lecturas nacionales en una extensa vigilia en el acceso al lugar de la boda:
"Muchísimos de los
invitados entraban en sus autos importados de vidrios polarizados, intentando no ser reconocidos. En tanto, el personal de vigilancia de seguridad y las encargadas de chequear las invitaciones se rehusaban a ”dar nombres”.