No al bronceado
En el balneario de Qingdao, provincia de Shandong, al noreste de China, algunas personas, en particular mujeres, están usando una suerte de "burka playera" para disfrutar del mar.
Estos chinos no muy amigos del sol han bautizado sus atuendos como carakinis, pues les protegen el rostro de quemaduras solares. En realidad para eso fueron diseñados, pero resulta que también sirven para proteger a los bañistas de picaduras de medusas e insectos.
Por cierto, los carakinis pueden ir acompañados de un traje completo, así todo el cuerpo se libra de esas molestias de un día de playa. Además, a muchos chinos -y sobre todo chinas- les disgusta broncearse.
Contra el cáncer
Como atuendo de moda, hay diseños imaginativos e incluso atractivos para los carakinis.
Por su descripción, no vendrían nada mal como herramientas para combatir el cáncer a la piel, cuya principal causa son los rayos ultravioleta.
En Estados Unidos, por ejemplo, es la forma más común de cáncer, mientras que Australia y Nueva Zelanda están entre los países con más alta incidencia de cáncer de piel.
Según un estudio de la Fundación para el Cáncer a la Piel, en China -el país más poblado del planeta- y su vecino Japón sólo entre 2% y 4% de todos los tipos de cáncer son de piel, aunque la incidencia ha aumentado en los últimos tiempos.